Niña en sus ojos Reina en su tierra (Jazmín) novela completa
Niña en sus ojos Reina en su tierra Capítulo 337

Capitulo 337

En la escuela, casi nadie sabia que Abelia también era de la familia Real

Al escucharla hablar asi, unas chicas solteron una risa burlona y con un tono sarcastico, se burlaron “Asi que le curd a tu abuelito? Solo fue un golpe de suerte. Que tu abuelo no haya salido lastimado, es de pure suerte. Ya sabes cómo son los viejos, a esa edad ya uno no piensa bien y caen fácil en las trampas de esa estaladora.”

“¿Y tu también te crees esas tonterias? Abelia, no me digas que te la pasas tan

Ustedes.“Abelia se puso tan furiosa que se le puso la cara verde.

Loreto funció el ceño y levantó la cabeza

n metida en los libros que ya te quemaste las neuronas.”

Justo cuando iba a hablar, el sonido claro y agradable de una chica a su lado se adelantó: “Estofadora? ¿Quién fue la que dijo eso?”

El tono de Jazmin era despreocupado, pero con un toque de frialdad.

En el momento en que ella habló, hasta Loreto sintió un escalofrio

“Yo lo dije.” Una de las chicas, cruzando los brazos y con una expresión de desden, se burlofriamente. “¿Acaso me equivoco? Eso de los curanderos no es más que un montón de estafadores ¿Qué más saben hacer aparte de convencer a los viejitos de comprar sus remedios caseros?”

“Apuesto a que Abelia es una compinche que trajiste. La chica no se guardó nada en sus comentarios ácidos, “Te salió bastante creible la actuación.” “A ver, repite eso si tienes valor!” Abelia estaba tan enfadada que se le puso la cara de todos colores y apretabo los puños lista para lanzarse a la pelea

La chica la miró con desprecio, viendo lo pequeña que era Abela, y con una sonrisa burlona le dijo: “Abelia, si a Max le pasa algo, tú como su cómplice no te salvarias”

Esta vez, Abelia estaba tan furiosa que realmente se lanzó a pelear, con sus puños en alto

Jazmin la detuvo.

Le hizo una señala Abelia con la cabeza.

Aunque Abelia estaba que echaba chispas, al final le hizo caso y aflojo los puños.

“Si dices que soy una estafadora, ¿por qué no apostamos a ver si tienes razón o no?” Jazmin miró a la chica que había hablado, con una sonrisa en los labios pero sinun ápice de alegría en sus ojos, donde se escondia una furia contenida.

¿Estafadora?

No era la primera vez que escuchaba a alguien decir eso

Normalmente no le importaria este tipo de comentarios.

Pero si su amiga estaba siendo insultada por esto, entonces no le quedaba de otra y tenia que intervenir.

Algunas cosas podian no importarle.

Pero no podia permitir que las personas que confiaban en ella terminaran siendo humilladas por su causa

“¿Apostar? La chica se quedó sorprendida por un momento, pero luego se nio, “¿Y que quieres apostar?”

Jazmin miró alrededor, a todos los curiosos, y con una voz que, aunque no era alta, todos pudieron escucharla claramente, le dio con calma S Max. despierta esta tarde, eso probarà que mi acupuntura funciona.”

“La que me difamo, tendrá que disculparse públicamente.”

“Está bien.” La chica aceptó de inmediato, con una risa fria, “Si Max despierta y esta bien, te pediré disculpas.”

“No a mi.” La voz de Jazmin era suave, pero fría y cortante, “Quiero que te disculpes en público. Si gano, quiero que corras alrededor de la cancha tres vueltas con un megafono gritando ‘Me equivoqué, soy una cabeza hueca, no debería haber difamado la acupuntura.”

“¿Qué dices, te atreves o no?”

La chica, al escuchar esta demanda, se le puso la cara fea

¿Correr alrededor de la cancha gritando con un megafono?

Eso haria que toda la escuela se enterara de esto.

Seria una vergüenza monumental.

Pero rápidamente, retomó su actitud burlona: “De acuerdo, acepto. Pero, ¿y si tú pierdes?”

“Si pierdo, haces lo que quieras conmigo. Además, si pierdo la apuesta, la ley se encargará de mi