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Ultimas 25

Capítulo 25

“Iris, cuando te volviste tan superficial? ¿Amenazarme con el divorcio va a compensar las pérdidas causadas por tu ausencia en el trabajo? Si quieres dinero, entonces trabaja duro. No pienses que la empresa te pertenece.”

Jonathan soltó mi mano de manera inconsciente, frunciendo el ceño, como si yo estuviera haciendo un berrinche sin sentido. Sus palabras me dejaron confundida; parecía haber olvidado que era su esposa y, por supuesto, una parte en la empresa me correspondía.

Pero tampoco quería discutir con él.

“No sabía que era tan importante. ¿Cómo se las arreglaba el Grupo Vargas antes de que yo llegara?” Dije encogiéndome de hombros.

“Si soy tan importante, entonces mi salario es demasiado bajo. Estoy perdiendo dinero.”

En ese momento, lo empujé a un lado y lancé mi bolso sobre el sofá.

Como no le gustó mi actitud, volvió a agarrarme de la muñeca, pero luego se detuvo, sorprendido.

“¿Cómo es que has adelgazado de nuevo? ¿Últimamente no has estado.

comiendo?”

No esperaba que se diera cuenta de que había perdido peso. Me reí de manera sarcástica, sin ganas de responder.

Realmente no tenía apetito. El doctor dijo que después de la quimioterapia probablemente tendría aún menos apetito, pero necesitaba comer algo, o mi cuerpo no aguantaría.

Mirando mi muñeca enrojecida por su agarre, suspiré ligeramente. Realmente estaba demasiado delgada, tal vez la próxima vez realmente

terminaría fracturándome.

“Iris, ¿podrías no hacer esto? Eres la directora del departamento de diseño, hay muchas cosas esperando tu aprobación. No puedes simplemente abandonar la empresa.”

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La voz molesta de Jonathan sono de novo, forzándome a responder.

Entonces? ¿Por qué no contestante la llamada de Fablo? Ah, y tampoco contestaste la mía. Miriam dijo que estabas muy ocupado,.”

Lo miré sin expresión, la sorpresa y un poco de pánico se mezclaron en sus ojos, pero finalmente se transformaron en Ira.

“Iris, esta tarde realmente tuve una reunión Importante, deja de hacer una escena.”

“¿Por qué siempre es culpa de los demás? ¿No puedes reflexionar sobre ti mismo? En la universidad no eras así, ¿por qué ahora todo es culpa de los demás?”

Simplemente lo miré enfurecerse, sin sentir la menor emocion en mi corazón. Al parecer, ni siquiera recuerdo cómo era en la universidad, ¿él todavía lo recordaba?

Si Miriam era inocente, ¿qué era yo? ¿Acaso me lo merecía?

Cerré los ojos, sintiendo mis párpados húmedos. Definitivamente no era así en la universidad, porque en ese entonces él confiaba en mí

incondicionalmente.

Cuando mi tesis de graduación fue acusada de plagio, a pesar de que podría haber ganado el mejor trabajo de graduación, todavía estaba siendo investigada.

Todos pensaban que, como una niña rica, naturalmente compraría el trabajo de alguien más. Especialmente porque la otra parte era una estudiante de bajos recursos, que realmente había estudiado duro, y sus palabras parecían tener más peso.

Ella insistió en que mi tesis era una copia de su trabajo, incluso mi tutor no estuvo de mi lado. En ese momento, sentí que mi mundo se desmoronaba lentamente, si podía graduarme o no era una cosa, pero ser acusada de algo que no había hecho era otra.

Nadie me creía, solo unos pocos amigos me apoyaron.

Durante ese tiempo, no vi a Jonathan durante una semana, aparte de

algunas llamadas ocasionales y mensajes de WhatsApp, nunca apareció.

Una semana después, apareció frente a mi tutor con las grabaciones de video y algunos de mis borradores de la tesis que había tirado, fue entonces cuando supe lo que había estado haciendo. Había hackeado las cámaras de seguridad de la escuela con algunos compañeros y había encontrado pruebas de que ella había robado mi trabajo.

También buscó en la basura para encontrar registros de mi tesis escrita a

mano.

Durante toda una semana, apenas durmió, y cuando apareció frente a mí, olía mal.

Pero sin importarme en lo más mínimo, lo abracé fuerte. En ese momento sentí que él era mi luz, la persona que aceptaría por el resto de mi vida.

Pero ahora, lo único que veo en sus ojos es desconfianza.

La gente cambia, eso es algo que he sabido desde pequeña, no sé por qué lo entendí justo en aquel momento.

De repente, un líquido tibio volvió a fluir de mi nariz, me cubrí

instintivamente, pero la sangre siguió fluyendo. Jonathan me miró con pánico y rápidamente sacó un pañuelo.

“¿Qué pasa? ¿Qué te sucede?”

Su voz temblaba, y el miedo en sus ojos parecía genuino. Él siempre ha sido así, justo cuando creo que puede pasar por alto el pasado y aún me ama, trae a otra mujer a casa, diciéndome que ya no siente nada por mí. Cuando pienso que me odia tanto que desearía que estuviera muerta, de repente se preocupa demasiado por mí.

Lo empujé con fuerza, y cubriéndome la nariz con un pañuelo, dije, “¿Qué más podría ser? ¡Estoy tan enojada contigo que me sube la presión! ¡Mientras menos te vea, mejor estoy, incluso podría vivir unos años más! De lo contrario, tarde o temprano ¡Tú y tus amantes me matarán de la ira!”

Lo que dije fue verdad, el doctor me había dicho que necesitaba mantenerme feliz y tranquila, de lo contrario, el enojo realmente podría causarme una enfermedad.

Su expresión cambió varias veces, y finalmente, entre dientes, dijo: “Haz lo que quierasi”

“Iris, Incluso si en el futuro me ruegas que me preocupe por ti, no lo haré.”

No digas que te sangra la nariz, aunque te desangres hasta morir, no volveré a mirarte ni una vez más!”

Luego tomó su chaqueta y salió de la casa, cerrando la puerta de un golpe.

En el momento en que escuché la puerta cerrarse, mi corazón, que se sentía muerto, comenzó a doler de nuevo.

Dejé que la sangre de mi nariz fluyera, tiñendo de rojo el frente de mi pecho.

Jonathan, ¿no sabes que tus palabras pueden volverse realidad?

Quizás lo que dijiste realmente suceda..