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Ultimas 250

Capítulo 250

El departamento de diseño del Grupo Vargas había seleccionado meticulosamente a cada uno de sus miembros. Aparte de tener una sólida formación académica, la habilidad era igualmente crucial.

La clave había sido la unidad del departamento, el cual siempre había permanecido sin ningún tipo de problema.

El bono del departamento de diseño era muy alto, pero la responsabilidad era acorde.

Con las acciones de Chiara, los derechos e intereses de todos se vieron afectados.

Ella nunca había administrado una empresa, por lo que no consideró esos aspectos, pensando que con el apoyo de Jonathan, ya era la jefa del departamento de diseño. Pero esa vez realmente provocó la ira de todos. Ella se paró en la puerta, y señalando a cada uno, dijo “¡Tú, tú y ustedes! ¿Ya no quieren trabajar? ¿Por su supuesta justícia van a renunciar a su trabajo?”

Viendo que Olivia y Marcos estaban a punto de avanzar, los detuve rápidamente.

“Escúchenme un momento. No importa si me voy o no, ustedes tienen que seguir trabajando aquí. La experiencia laboral en el Grupo Vargas es muy importante para ustedes, deberían saberlo. No permitan que algunas personas afecten su futuro.”

Lo que dije era la verdad, tener experiencia de trabajo en el Grupo Vargas hace que sea mucho más fácil encontrar empleo más adelante.

Además, hay pocas empresas que puedan compararse con el Grupo Vargas en términos de salarios y proyectos.

Escuchando mis palabras, todos se calmaron gradualmente.

Aunque estaban llenos de indignación, sabían que no deberían dejar que mi situación afectara su futuro.

No quería involucrar a inocentes con mis problemas.

Al ver que todos dejaron de hablar, Chiara se enderezó.

“Si quieren seguir trabajando en el Grupo Vargas, dejen de hacer esto. Ustedes apoyan a ris, pero ¿saben que al renunciar ella se va a llevar las patentes? Sin las patentes, ¿cómo va a seguir el departamento de diseño? ¿Cómo van a seguir ganando dinero?”

Ella siempre había sido buena para desviar la atención, y en ese momento, no fue diferente.

Pero todos la miraron como si fuera una tonta.

“¿Por qué Iris no podría llevarse sus propias patentes?”

“Exacto, esos son sus diseños originales, no tienen nada que ver con la empresa.”

“La hacen renunciar, ¿y todavía pretenden que contribuya a la empresa? ¡Qué descaro!”

Chiara los observó atónita, sin entender.

De hecho, no entendía que esos diseños eran los que había realizado para competencias o inspirada en momentos de creatividad.

No solo

no tenían nada que ver con la empresa, sino que el departamento de diseño tampoco había participado en ellos.

Pensaba que

todas las patentes eran el resultado del trabajo en equipo, pero estaba equivocada.

Después de todo, durante su tiempo en el departamento de diseño, los diseños y proyectos se completaron mediante discusiones, y ella simplemente se autoproclamó como la diseñadora principal, especialmente en los proyectos actuales.

Tomando algunos documentos, se los entregué diciendo, “Chiara, ¿ya lo olvidaste? Estas patentes las solicité cuando estaba en la universidad. Estos diseños se basaron en mis creaciones anteriores, así que ¿qué tienen que ver con la empresa?”

Ella no tomó los documentos, solo me observó furiosa.

“¿Estás presumiendo conmigo? ¡Si ya te echaron!”

Asentí con la cabeza, “En efecto, es algo de lo que presumir, ¿no crees?”

“Estos diseños los pude completar en la universidad, y aun así, hay quienes los arruinan ahora. Chiara, ya que te consideras capaz de manejar bien el departamento de

diseño, entonces demuestrame tu habilidad.”

Con mi caja ya empacada en mano, me acerqué a ella y la miré con desdén.

“Si vas a reemplazarme, entonces alcanza mi nivel.”

Que todos sepan, que tú eres la verdadera genio, ¡Iris!”