Ultimas
Ultimas 278

Capítulo 278

Por la noche, Begoña, usando un vestido rojo que delineaba sus curvas perfectamente, finalmente se transformó en una dama seductora.

Lo que no esperaba era que solo fuéramos nosotros tres, incluyendo a Diego.

Cuando él miró el vestido de Begoña, no pudo evitar fruncir el ceño.

“Las mujeres que usan ropa interior demasiado ajustada corren el riesgo de desarrollar enfermedades de las glándulas mamarias, como ella.” Dijo señalándome.

En ese momento me sentí extremadamente avergonzada, queriendo explicar que no era por la ropa interior.

Begoña, sin perder la compostura, le lanzó una mirada despectiva.

“Esto es natural, no necesito apretar para tener escote. Y pensar que eres médico, ¿nunca has visto a una mujer con un cuerpo tan bueno como el mío?”

De repente, se acercó a Diego, diciendo, “¿Qué tal si algún día lo pruebas?”

“Claro.”

Esa respuesta casi me hizo casi escupir el agua que estaba tomando.

Observándolos ir y venir en su conversación, sin tener en cuenta lo que yo pensaba, tuve una epifanía.

No era de extrañar que Diego fuera quien me hubiera avisado de la cena, no me había dado cuenta, pero al parecer, ambos se habían fijado el uno en el otro.

Pensando que a partir de ese momento tendría dos lenguas venenosas a mi alrededor, me sentí algo aliviada de que ambos estuvieran en el mismo bando.

**

Durante la cena, escuché sus burlas y vi sus pequeños coqueteos, encontrándolo bastante entretenido.

¿Así que así se sentía disfrutar del drama en vivo?

Sin embargo, al final de la noche, cuando estábamos por dejar a Begoña en el hotel, ella me abrazó fuertemente.

“Iris, te apoyo en tu decisión de divorciarte. Cuando hagas los trámites, definitivamente estaré allí. No estás sola, me tienes a mí, los Moreno ahora solo somos nosotras dos. Siempre te apoyaré.”

Luché por contener las lágrimas, sintiendo un nudo en la garganta.

Luego, me empujó con fuerza, “De ahora en adelante, estaremos siempre la una para la otra. Concéntrate en tu carrera, yo te apoyo. Luego, encuentra a alguien joven y en buena forma física. Si alguna vez me tratan mal, tienes que respaldarme.”

No pude creer lo que había escuchado, ¿quién podría tratarla mal?

En ese momento, su mirada se desvió involuntariamente hacia Diego, cuyas orejas se tornaron sospechosamente rojas.

Asintiendo con determinación, dije, “No te preocupes, ahora soy su objeto de estudio más importante. Si alguien te trata mal, simplemente me negaré a ser tratada.”

Begoña se rio entre lágrimas y nos apuró a volver.

00.476

Capítulo 278

Diego tenía que cubrir una guardia nocturna, así que me llevó de vuelta al hospital, durante el camino, no pude evitar sentirme un poco confundida con la situación.

“Tú y ella.

“Recién empezamos.”

“Ustedes dos…”

“No hemos dormido juntos.”

“Ella regresará…”

“A desarrollarse aquí en el futuro, ¿alguna otra pregunta?”

Él bloqueo todas mis preguntas, así que rápidamente negué con la cabeza.

De repente, me eché a reír, el destino a veces era realmente asombroso.

Al día siguiente, volvimos a despedir a Begoña.

Ella realmente no quería irse, después de todo, su nuevo novio todavía estaba allí.

Pero el Grupo Moreno tenía demasiados asuntos pendientes, y que ella hubiera podido ir a verme por tanto tiempo ya era bastante.

Antes de irse, ella y Diego volvieron a ponerse cariñosos.

Rara vez veía una expresión de nostalgia en el rostro serio de Diego, lo cual me resultó extremadamente interesante.

Tomé una foto a escondidas y se la envié a Violeta, quien se mostró algo disgustada.

[¿Recién te das cuenta? Lo supe desde el primer momento, esos dos, no son nada inocentes.]

Al leerla suspiré interiormente, después de vivir más de veinte años, mi única experiencia amorosa había sido con Jonathan, claramente me faltaba perspicacia.

Sin embargo, al final, Begoña siguió advirtiéndome.

“Chiara es demasiado extremista, he visto muchas mujeres como ella, ten cuidado. Ella no te dejará en paz, nunca te encuentres con ella sola.”