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Ultimas 301

Capítulo 301

Cuando él dijo esa frase, Chiara se desmoronó.

Luego se quedó atónita por un momento, y finalmente soltó una risa amarga, “Jon, ¿todavía le crees?**

¿Por qué no me creería?

Las aventuras de Jonathan no eran cosa de uno o dos días, ¿acaso no había cumplido con mi trabajo todos esos años?

¿Acaso porque él me había traicionado, ya no debía mantener mi dignidad?

Jonathan la miró de reojo sin ninguna emoción, y luego dirigió su vista hacía los demás.

“Compartan sus pensamientos, esto no puede quedar así.”

Su actitud de indiferencia hacia Chiara inmediatamente encendió su ira.

Ella golpeó la mesa y se puso de pie, con una expresión extremadamente agraviada.

“Presidente Vargas, incluso si quieres protegerla, deberías ver el momento adecuado ¿No? Ella ya fue denunciada por plagio, ¿no? Incluso fue investigada por usar patentes ajenas. Quizás, como ella robó el diseño de alguien, fue que ocurrió este problema.” Dijo cubriéndose el estómago, con una cara llena de agravio, pero aun así, mantuvo la cabeza en alto, llena de

obstinación.

“A los colegas del Grupo Vargas, por supuesto que les creo, pero hay quienes no son parte de la compañía, ¿quién sabe qué no harían por dinero? ¿No hay quienes, por dinero, vendieron hasta sus anillos de matrimonio y collares?”

Estrella y yo nos miramos, viendo la sorpresa en los ojos de la otra.

Chiara realmente estaba dispuesta a decir cualquier cosa para difamarme, ¿Incluso me había investigado? Asier, algo indignado, murmuró en voz baja.

“El problema ocurrió ayer, justo cuando fuiste a buscar los documentos y el discurso, creo que tú eres la más sospechosa.”

“¿Qué? ¡Dilo de nuevo!” Al escucharlo, ella se enfureció, enderezó su espalda y

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Capítulo 301

sacó aún más el estómago.

“Estoy llevando el hijo de Jonathan, soy una Vargas, ¿Por qué haría algo así? En cambio, hay personas que, probablemente por rencor, me estén

incriminando deliberadamente.”

Ella siguió lanzándome sus acusaciones, llevándome al límite.

“¿Tienes pruebas? Si no las tienes, te demandaré por difamación, y tendrás que dar a luz en la cárcel.”

Levanté la cabeza sin emoción alguna y la miré fijamente.

Ella tartamudeó “Tú… tú… tú…” por un momento, pero al final no pudo presentar ninguna prueba.

Ella no tenía pruebas, pero yo sí. Inmediatamente encendí el proyector y abrí las fotos que Lucía había tomado.

“Aquí, cuando cometí un error de ortografía en la cuarta reunión, usé este PPT, Olivia fue quien encontró el problema. Posteriormente, el contenido fue corregido, así que nuestro PPT ya no tuvo ese error, pero el de Gran Monte sí. Este detalle del diseño, se finalizó antes de la última reunión.”

Chiara me lanzó una mirada despectiva, preguntando, “¿Y eso qué prueba?”

Lucía lo entendió rápidamente, “Que el discurso que usó Iris se basó en el contenido de la cuarta reunión. Ella dijo que el contenido era casi el mismo, y que recordaba los detalles del diseño posterior, así que no lo reimprimió.”

Fernanda también se dio cuenta, y su mirada se fijó directamente en Chiara.

“Ayer le diste tu discurso, ¿y todavía dices que el diseño que obtuvo Gram Monte no tiene nada que ver contigo? ¡Ese pequeño detalle solo estaba en el diseño que tenías en tus manos, nadie más lo tenía!”

A veces, me sorprendo de mí misma, después de todo, recordaba el

contenido, y mucho de él podía reutilizarse.

Nunca imaginé que ese pequeño descuido revelaría el problema.

Observé tranquilamente a Chiara, mientras los demás colegas la observaron con miradas llenas de desaprobación.

No era una evidencia crucial, pero era suficiente para probar que era culpable.

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Capitulo 30T

Chiara negó todo con la cabeza, mirando lastimeramente a Jonathan, y en el siguiente segundo, se desplomó hacia un lado.