Volvemos a Empezar, iMi Ex! ( Sofía Carreras ) Novela
Capítulo 107

Capítulo 107

La familia decidió hacer una visita, aunque la casa se recorrió rápido. Noelia quería jugar en el columpio del jardín trasero, y Rafael la acompañó, mientras que el abuelo Isaac, al escuchar que Leonardo sabía jugar ajedrez, lo llevó a jugar una partida con él.

Sofía, viendo que los niños estaban entretenidos y acompañados, subió a la habitación que solía compartir con Rafael en la antigua casa. Estaba limpia, lo que le hizó pensar que el tío José hacía tiempo que no se quedaba allí.

Sacó un libro titulado “Destinos entrelazados” de la estantería. Entre cuidar a los niños, diseñar y ganar dinero, parecía que nunca había tenido un momento de tranquilidad para disfrutar de la lectura. Se sumergió tanto en el libro que, al llegar a la mitad, el sueño la venció y se quedó dormida en el sofá.

Cuando Rafael entró a la habitación, encontró a Sofía durmiendo profundamente con el libro todavía en sus manos. Le puso suavemente una manta encima antes de salir de la habitación. Al bajar, Noelia le preguntó en voz alta: “¿Papá, dónde está mamá?”

“Silencio, Mamá está durmiendo. Vamos a buscar al bisabuelo y a tu hermano“, respondió Rafael.

“¿Mamá está durmiendo y ya es de noche?”

En ese momento, Alba se acercó a Rafael para preguntarle si ya era hora de preparar la cena. Rafael, pensando en Sofía arriba durmiendo, dijo: “Más tarde“.

Llevó a Noelia al estudio del abuelo Isaac, donde Leonardo y el abuelo estaban concentrados en su partida de ajedrez. Rafael observó el tablero y notó que Leonardo estaba jugando muy bien; el abuelo Isaac tenía que esforzarse para no caer en sus trampas.

“Bisabuelo, ¿quién está ganando?“, preguntó curiosamente Noelia. Siempre había sabido que su hermano era bueno en el ajedrez, y parecía que el bisabuelo también era un experto. Quería saber quién ganaría.

“Jajaja~~ Leo es muy bueno. Ahora estamos empatados, tres a tres“, respondió el abuelo Isaac con una sonrisa. Estaba impresionado con su bisnieto, que se mostraba tan habilidoso como su nieto.

“Entonces, quien gane esta partida será el número uno. Me quedaré a ver“, dijo Noelia, arrastrando un taburete para sentarse al lado, y Rafael también tomó asiento.

Con público observando, Leonardo se mostró aún más motivado.

Al despertar, Sofía se sorprendió de haberse quedado dormida. Había una manta sobre ella, probablemente Alba la había cubierto al

mir.

Al ve que ya había oscurecido, Sofía se levantó, guardó el libro y bajó. No encontró a nadie, así que se dirigió a la cocina, donde Alba estaba preparando la cena. “Srta. Sofía, debes tener hambre. El joven señor dijo que prepararíamos la cena más tarde hoy“.

“No te preocupes, Alba. ¿Dónde están todos?” Preguntó Sofía.

“Probablemente en el estudio del Sr. Isaac. ¿Por qué no vas a ver?” Contestó Alba.

“Está bien, iré a echar un vistazo“.

Al llegar a la puerta del estudio, Sofía vio a la familia reunida en silencio, incluso la pequeña Noelia estaba quieta, observando cómo su hermano y su bisabuelo jugaban ajedrez. Sin querer interrumpir, entró suavemente y se colocó detrás de Noelia. Rafael, al verla, pensó que se habría despertado después de un rato..

Poco después, la voz emocionada de Leonardo resonó: “Bisabuelo, perdiste“.

“A pesar de la derrota, el abuelo Isaac no pudo estar más feliz. “¡Vaya que Leo es impresionante, me ha derrotado!“.

“Wow, hermano, eres increíble!“, exclamó Noelia, aplaudiendo y felicitando a su hermano.

Rafael se acercó a Leonardo, le acarició el cabello y dijo con orgullo: “Leo, lo has hecho muy bien“.