Capítulo 235

La llamada se conectó rápidamente y del otro lado del teléfono, la voz emocionada y ansiosa de Pilar resonó: “¡Rafa!

Pilar, por lo que veo, en estos años no has aprendido mucho, pero tus tácticas sí que han mejorado. ¿Por qué fuiste a hablar con Sofía sobre cosas que no son ciertas?

Pilar soltó una risa suave y con voz inocente dijo, “Rafa, ¿qué dije? Solo estaba pasando por ahí, un amigo quería encargar un vestido

preguntar.

y

fui a

Esta es la última vez que te llamo, por favor no vuelvas a contactarme en el futuro, no es apropiado, y por favor, no molestes a mi esposa.

No puedo, Rafa, ¿podemos volver a cómo éramos antes? Antes éramos felices.”

Felices? ¿Alguna vez me viste sonreír cuando estábamos juntos?

Pilar se quedó paralizada con el teléfono en la mano.

Después de que Rafael dijera fríamente eso último, colgó directamente el teléfono, luego bloqueó su WhatsApp y su número.

Sofía, después de acostar a los dos niños, salió y vio a Rafael parado en el balcón. Se le acercó diciendo, “Rafa, entra, hace viento esta noche.”

Rafael se giró y con un cambio en su rostro, la frialdad que había presentado durante la llamada desapareció de inmediato, mostrando una sonrisa, entró a la casa.

Abrazó a Sofía, apoyando su barbilla en la cima de su cabeza.

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Sofía solo entonces se dio cuenta de lo pegajoso que era.

“¿Qué pasa?

Nada… Acabo de llamar a Pilar.

Sofía se sorprendió ligeramente al escuchar que había llamado a Pilar.

Rafael sintió la rigidez de la persona en sus brazos y se apresuró a explicar, “Le dije que no volviera a molestarnos y la bloqueé. Esposa, tú también bloquéala, no atiendas sus llamadas.”

Sofía no esperaba que la razón por la que llamó a Pilar fuera para decirle eso. Sentirse conmovida era poco decir. Anteriormente, siempre estaba preocupada e insegura.

Pero en ese momento, él le demostró su amor con acciones reales, dándole confianza y seguridad, haciéndole saber que la amaba.

Rafa, gracias.”

“Esposa, no me importaría que me agradecieras de otra manera.” Dijo, abrazando a Sofía más fuertemente contra él. Sofía sintió la reacción de cierta parte de él y se sonrojó intensamente, y aprovechó un momento de distracción de Rafael para liberarse de sus brazos y escapar rápidamente diciendo, “Voy a ducharme.”

Rafael miró su huida con una gran sonrisa, su esposa era realmente adorable, después de tanto tiempo, aún se sonrojaba tan fácilmente.

En el momento en que Pilar recibió la llamada de Rafael, presionó el botón verde emocionada. No esperaba que Rafael supiera que había ido a buscar a Sofía, pensó que la personalidad de Safía solo la llevaría a sospechar y dudar, y que nunca a confrontaría a Rafael directamente.

No se imaginó… que ahora ellos estuvieran tan unidos, y que Rafael la llamaría personalmente para advertirle e incluso que la bloquearía de WhatsApp y del teléfono.

Pilar, llorando, abrazaba su móvil y marcaba una y otra vez ese número, al que ya no podría conectarse nunca más, los mensajes de WhatsApp tampoco podían enviarse. Al lado de sus pies había varias botellas vacías, agarró otra y comenzó a beber directamente de la botella.

No podía aceptarlo, ¡por qué, por qué!

Todo por culpa de Sofía, fue por ella que Rafa la trató así.

Con ese pensamiento, una mirada vengativa cruzó sus ojos.

Desde el primer momento que vio a Rafa en la universidad, se sintió atraída. En ese entonces, Rafael era muy discreto, hablaba poco, era reservado. Ella lo siguió, averiguando dónde iba y su horario, apareciendo frente a él intencionadamente, y con descaro le pidió su numero. Dicho de otra manera, lo persiguió con esfuerzo hasta que lo consiguió.

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