Volvemos a Empezar, iMi Ex! ( Sofía Carreras ) Novela
Capítulo 259

Capítulo 259

Rafael y Sofia habian estado en el bar por alrededor de una hora cuando decidieron volver a casa. Al ver que se iban, los demás también optaron por no continuar la noche y todos salieron juntos del local.

Sofia no habia bebido, asi que ella condujo el coche, no habia problema en que ella y Rafael se fueran primero tras despedirse del grupo. Los demás, que generalmente conducian por su cuenta, esa noche habian bebido, por lo que aparte de Rafael y Sofia, los siete restantes se repartieron en tres coches y llamaron a conductores sustitutos

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Sergio junto con Giovanna, Oscar y Adela compartieron un coche y se dirigieron a la casa de los padres de Oscar. David, que no h

había llevado coche y habia llegado con Oscar desde la oficina, se fue con Simón, quien también se ofreció a llevar a Ari a casa.

Una vez que todos se organizaron, los conductores sustitutos llegaron y se marcharon.

Antes de irse, Adela le susumó a Ariana: “Ari, si vas al partido de baloncesto, cuéntame para ir a ver a los jóvenes apuestos de la escuela desplegando su energia en la cancha”

Ariana, alzando la mirada, via a Oscar detrás de ellas y se sintió un poco culpable, luego apurda Adela para subir al coche, “Ya lo sé, ya lo sé, el conductor ya llegó, sube de una vez.”

Óscar miraba a Ariana sin mostrar ninguna emoción, casi no hablan hablado en toda la noche. Él no era de hablar mucho y Ariana, evitandolo intencionalmente, pasó la noche entre murmullos con Adela o en calurosas conversaciones con Sofia y los demás, o pegada a su celular enviando mensajes

Ariana, pretendiendo no notar su mirada, se escondid detrás de Simón, “Simón, ya llegó el conductor?”

Este, consultando su teléfono, respondió, “Está a punto de llegar, lo hará en 2 minutos. Primero te llevamos a casa y luego a David.”

Oscar, urgido por Adela, también subio al coche, que se detuvo frente a donde estaban Simón y los demás. Adela bajo la ventana y grito, “Ari, no te olvides de avisarme”

Anana asintió de manera distraida

“¡Qué amistad! ¡No se daba cuenta de cómo su propio hermano se ponia serio a su ladol Y aún así me arrastraba allo!

Sofia condujo el Rolls–Royce de Rafael de vuelta a la casa familar, donde todos ya estaban durmiendo.

Después de estacionar el coche, él aunque habia bebido, podia caminar por su cuenta, asi que ambos se tomaron de la mano y

o y entraron a la

El rostro de Rafael, enrojecido por el alcohol, le daba un aspecto tierno y suave, diferente a su usual expresión definida y que le hacia parece mucho más a un clásico galán.

Una vez de

dentro, Sofia le pidió a Rafael que subiera primero mientras ella preparaba un vaso de agua con miel

el en la cocina.

Al subir y entrar al cuarto, éste se estaba quitando el saco de su traje. Bajo el saco, llevaba una camisa azul que ahora parecia más ajustada que antes. Antenormente le quedaba holgada, pero en este momento resaltaba su forma, evidenciando que había ganado algo de peso. Rafael se veia más como un principe encantador en este instante.

“Amor ¿qué estás mirando?” Rafael, al ver a Sofia con el vaso de agua con miel, notó cómo lo observaba fjamente. Se miró algo confundido, sin encontrar nada extraño en el que justificara tal atención.

“Rafa, quitate el saco, realmente has ganado algo de peso… susurró ella, mientras Rafael fruncia el ceño, esta vez visiblemente molesto. Una cosa era que otros lo dijeran, pero que su propia esposa lo señalara de esta manera, lo hace sentir realmente atacado.