Capítulo 382

Gerard también asintió, mostrando su aprobación.

Sofia entendía sus preocupaciones, pero si Rafa no queria irse, realmente podrían llevárselo? Era imposible mover a un hombre vivo así como así, “Confio en él. Dijo ella.

David suspiro suavemente y dijo, “Está blen, haremos como dices.”

Luego, levantó la vista y cruzó miradas con Gerard. Los dos hombres salieron de la habitación de Sofia, se estaban preparando para todos los escenarios posibles. Estaban dispuestos a darle unos días más a Sofía, si el hermano mayor decidía regresar con ella, sería lo ideal. Si no, no tendrían más remedio que actuar con firmeza y llevarlo de vuelta a San Bernat primero, quizás al regresar a un lugar familiar, recordaria todo. ¡Dejar que el hermano mayor regresara con alguna princesa a ese reino aislado era totalmente impensable!

Una vez que se fueron, Sofia llamó a Camila por videollamada. Ya era de noche en San Bernat y los pequeños ya estaban dormidos. Sofia le contó brevemente a Camila que había encontrado a Rafael y mencionó algunos contratiempos que retrasarían su regreso. Pidió su ayuda para cuidar a los niños unos días más. Al oir que Rafael había sido encontrado, Camila se emocionó y rápidamente tranquilizó a Sofía, “No te preocupes, Sofi, Leo y Noe son muy buenos, y su tía también viene a verlos seguido. Tú soluciona lo que tengas que solucionar y trae al Sr. Amorós de vuelta, aquí en San Bernat los esperamos.”

“Gracias, Camila.” Sofía estaba realmente conmovida. Camila debía estar hablando de Ari, qué bueno que estaban ellos, de otro modo no se hubiera sentido tranquila dejando todo por tanto tiempo.

“Mamá definitivamente traerá a papá de vuelta a casa. Sofia se lo prometió a si misma en silencio.

David rápidamente descubrió que Rafael también estaba alojado en el mismo hotel y corrió a informar a Sofia. Tras pensar por un momento, Sofía salió con su teléfono directamente.

Fue a la recepción, intentando averiguar el número de habitación de Rafael. Se dio cuenta de que ahora él usaba el nombre de Zero, y ella no tenia ninguna de sus identificaciones. La recepcionista se negó a revelar cualquier información, haciendo que Sofía, desanimada, se diera la vuelta con la intención de esperar en el lobby, tal vez él bajara a comer y pudiera verlo.

Justo cuando se giró, vio a Rafael saliendo solo del ascensor. Rafael también vio a Sofia parada en el lobby del hotel, y se miraron a través de la multitud. Rafael camino hacia ella.

Finalmente se detuvo a un paso de Sofia y le dijo, “Qué coincidencia, ¿también te hospedas aquí?”

Sofia de inmediato sintió los ojos humedecidos, y luego asintió, “Si.”

Rafael, con una ceja levantada, la observó en silencio. Cada vez que la veia, parecia estar triste, y él no podia evitar querer abrazarla para consolarla. No podía negar que, en el momento en que salió del ascensor y vio a Sofía, su corazón se llenó de alegría, especialmente después de escuchar que eran esposos, estaba aún más ansioso por encontrarse con ella.

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