Capítulo 389

Gerard especulaba, ¿acaso Rafael habia recuperado la memoria? Pero al mirarlo a los ojos, no parecía ser el caso. De todos modos, penso, son una pareja y pueden hacer lo que quieran. No le importaba por qué hablan vuelto juntos, simplemente le dijo a Sofía, “Recuerda cargar tu teléfono la próxima vez que salgas.”

David, por otro lado, no podía dejar de mirar a Rafael, preocupado. ¿Cuándo recuperaria la memoria su hermano mayor? Se había ido a negociar con la mafia y con esa princesa, ¿y si al final Rafael decidiera no volver con ellos a San Bernat?!

Al ver que todos hablan regresado, Gerard se sintió más tranquilo y dijo, “Bueno, vámonos a dormir.”

Rafael, al notar cómo Gerard hablaba con Sofia, se sintió molesto. ¿Quién era ese hombre y por qué se preocupaba tanto por Sofia? Con un tono poco amable, preguntó, “¿Quién es él?”

Sofía se sorprendió por un momento antes de darse cuenta de que Rafael se refería a Gerard. Justo cuando estaba a punto de explicar, Gerard, con una sonrisa, le dijo a Rafael, “Soy tu cuñado.

Rafael no creía lo que Gerard decia, frunció el ceño y replico, “Imposible.”

Gerard saltó de inmediato y dijo, “¿Cómo que imposible? Si Sofia es mi hermana y tú eres su esposo, ¿acaso eso no me convierte en tu cuñado?” Gerard hablaba con tanta convicción, casi como si realmente creyera que Sofia era su hermana de verdad.

Rafael frunció aún más el ceño, tratando de determinar la veracidad de sus palabras.

Sin esperar a que Sofia explicara, Gerard se fue corriendo y David también se marché. Solo quedaron ellos dos en la entrada de la habitación.

Sofia, algo apenada, dijo, “Él debe estar bromeando.” No tomaba en serio que Gerard dijera ser su hermano, pensando que era imposible.

Sofia se giró para sacar la tarjeta de la habitación, abrió la puerta y dijo, “Entonces… entraré primero.”

Rafael asintió, preparándose para verla entrar. Sofía empujó la puerta y al dar unos pasos, se volvió para preguntar, “¿Podemos comer juntos mañana?”

“Claro,” respondió Rafael, aconsejándole que descansara. Ambos parecian no querer separarse. Sofia entró a su habitación y, al cerrar la puerta, se sentó apoyada en ella, tocándose la cara sonrojada y el corazón, que latia rápidamente.

Rafael se quedó por un momento en la puerta antes de irse.

Al volver a su habitación, Rafael no esperaba encontrarse con la princesa esperándolo. Frunció el ceño mientras la princesal preguntaba con duda, “¿Has recuperado la memoria?”

Rafael se ajustó la corbata, negando con la cabeza, “No.”

La princesa no se molestó, sino que se burló de si misma, “Parece que realmente son esposos y se aman. De lo contrario, ¿cómo se explica que tú, siempre tan frio con todos, hayas salido a pasear y comer con alguien?

Rafael se arremangó sin decir nada, como aceptando la interpretación de la princesa. De lo contrario, no podia explicar sus sentimientos indescriptibles hacia Sofía.

La princesa suspiró profundamente y se acercó a Rafael, sonriendo, “Nuestro yate zarpa mañana, ¿vienes conmigo? Regresar a mi pais y ser mi consorte tampoco está mal.”

Rafael se detuvo y dijo, “Princesa, yo…

“No hace falta que respondas, ya sabia que no te irias la princesa cortó la respuesta de Rafael, sin querer escuchar una negativa, “De cualquier manera, no pierdo nada. Consegui conexión con la mafia, y aquel latino que estaba allí el dia del trato, seguro que era alguien que conocías antes.” Ella habia notado cómo aquel hombre no dejaba de mirar a la persona detrás de Rafael durante el intercambio, probablemente el mafioso hablaba en nombre de él.

Capítulo 390

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